‘Guerra Civil del beisbol’; sin garra felina no sabe igual
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Con los Tigres de Quintana Roo en el último de lugar de la Zona Sur, se extraña un clásico de la Liga Mexicana de poder a poder
Los Diablos Rojos están que no creen en nadie, apoderándose de la primera posición en la Zona Sur y cuando pasa eso es menester hablar del máximo rival que éstos tienen y esperar que ese equipo también esté luchando por acceder a los primeros sitios del standing.
La realidad es otra, pues los otrora poderosos Tigres andan “por la calle de la amargura”, una situación que no ayuda a la calidad de la competencia en la pelota caliente.
Los felinos, instalados en Cancún desde 2007, siempre se habían caracterizado por ser un equipo de grandes peloteros y resultado; una novena que se hallaba siempre peleando los playoffs. No por nada se creó la llamada “Guerra Civil” o sea los enfrentamientos entre ellos y los Diablos Rojos del México.
Pero para ello es menester remontarse a la época en que Diablos y Tigres compartían casa, es decir el Parque del Seguro Social y todavía con los cambios de sede, a Puebla y Cancún, las innumerables batallas entre estos dos son legendarias. No se demeritan los juegos que siguen teniendo, pero últimamente ha sido con situaciones opuestas.
El 21 de abril de 1955 en dicho recinto, se jugó la primera versión del clásico del beisbol mexicano, cuando los Diablos Rojos “visitaron” a los Tigres de México. Ese día comenzó la gran rivalidad conocida como “La Guerra Civil”.
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Después de una trayectoria emblemática en la capital y de innumerables capítulos en contra de los escarlatas, lograron 8 campeonatos, dejando un legado imborrable. Entonces se tomó la decisión de trasladar al equipo a Puebla en 2002. Bajo el nombre de Tigres de la Angelópolis, conquistaron su noveno título, pero tras cinco años se convirtieron en los Tigres de Quintana Roo. Ahí obtuvieron sus últimos tres títulos, para un total de 12.
El último galardón fue obtenido en el puerto en 2015 y desde entonces esta novena no ha obtenido los mejores y parece, de momento, lejos de volver a la cima. Aunque seguramente ya estarán tomando acciones para volver a figurar en grande, para hacer cumplir lo que dice su slogan: “El equipo que nació campeón”.
PARA ARRIBA Y PARA ABAJO
Refiriéndose a sus tres últimas temporadas, tenemos que en 2022 el equipo terminó con 44 ganados y 46 perdidos, quedando en el quinto lugar, un estatus para nada acorde con las épocas de gloria, pero la cosa empeoró al siguiente año.
En la temporada 2023, los Tigres terminaron en sexto lugar con 39 ganados y 51 perdidos, pero logrando acceder a los playoffs contra su máximo rival, mismo que se agenció la serie 4 juegos 2
En la actual, hasta este lunes, los felinos se ubican en el último lugar, con apenas 4 victorias y 11 derrotas, viniendo precisamente de una barrida por parte del Águila de Veracruz y en el propio estadio de los Tigres, el Beto Ávila.
Por si fuera poco, en la más reciente serie entre Diablos y Tigres, celebrada en el Parque Alfredo Harp Helú, los Pingos se impusieron por barrida, de esa manera agudizaron la crisis que se vive en Cancún.
